(Liturgia de las Horas, Miércoles II, Laudes)
Estáte, Señor, conmigo
siempre, sin jamás partirte,
y, cuando decidas irte,
llévame, Señor, contigo;
porque el pensar que te irás
me causa un terrible miedo
de si yo sin ti me quedo,
de si tú sin mí te vas.
Llévame en tu compañía,
donde tú vayas, Jesús,
porque bien sé que eres tú
la vida del alma mía;
si tú vida no me das,
yo sé que vivir no puedo,
ni si yo sin ti me quedo,
ni si tú sin mí te vas.
Por eso, más que a la muerte,
temo, Señor, tu partida
y quiero perder la vida
mil veces más que perderte;
pues la inmortal que tú das
sé que alcanzarla no puedo
cuando yo sin ti me quedo,
cuando tú sin mí te vas.
Páginas
- Lo que pretendemos.
- Quienes somos. Movimiento eclesial: "De Jerusalén a Betania".
- Principal
- Asociación Publica de Fieles.
- Cenaculo de Betania.
- Llamados a la santidad
- Siguiendo al Maestro
- Caminando con Cristo.
- Camino de Emaus.
- Cenáculos de Betania: Grupos de oración.
- Maria, Madre de Misericordia.
- San Juan de Avila.
- La Palabra compartida.
- News.va · Noticias desde El Vaticano
- EVANGELII GAUDIUM: La alegria del Evangelio.
- Enciclica "Laudato si"
- Amigos del Papa Francisco.
- Lumen fidei.
- Exortación Postsinodal " Amoris Laetitia".
- Bula de convocatoria del Año de la misericordia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario